La clave de la generosidad es la oración y el ayuno. Aquí está el por qué
Dios frecuentemente nos dice en las escrituras que oremos y ayunemos. Lo hace para que podamos restablecer nuestros corazones y centrarnos en lo que es importante, teniendo en cuenta la generosidad. Si bien los estadounidenses a menudo son vistos como generosos, podríamos argumentar que eso estira un poco la verdad. Nuestras vidas están…