¿El Cordero de Dios?

Usamos muchos nombres para Jesús: Mesías, Cristo, profeta, Predicador, Maestro y Rey, entre otros. Pero un nombre, Cordero de Dios, se destaca por describir ampliamente el propósito del Señor. La mayoría de las personas consideran que algo que crean o logran es su mayor logro. Pero el mayor acto de Jesús fue morir.

Su sacrificio fue el corazón del plan del Padre para la humanidad. Desde el principio, Dios ha tratado con los pecados de su pueblo a través del sacrificio. En el Jardín del Edén, Él ofreció el primer sacrificio cuando mató a un animal para usar su piel como cubierta para Adán y Eva. Las hojas de higuera que llevaban podían cubrir sus cuerpos pero no podían cubrir su pecado.

Levítico 17:11 nos dice que la vida está en la sangre, y Ezequiel 18:4 dice, «El alma que peca morirá». El pecado siempre requiere la muerte por la justicia y la santidad de Dios. Una vida debe terminar como pago por el pecado, o una vida debe ser dada como pago por las malas acciones de otro.

Dios siempre ha tratado con el pecado a través del sacrificio. Jesús vino como el portador del pecado para todo el mundo – Él asumió la plena responsabilidad de todos nuestros pecados y culpas para que podamos ser libres del castigo. Por sus heridas, somos hechos justos y santos a los ojos de Dios.

El nombre de Cordero de Dios es importante porque habla de la muerte sustitutiva en la que Dios desató toda su furia y su justo juicio sobre Jesús. Pero gracias al sacrificio del Salvador, podemos estar ante Dios y decir, «Gracias por llamarle mi Padre».

Extraído de « El Cordero de Dios » de In Touch Ministries (usado con permiso).

Publicado originalmente el 03 de junio de 2010.