Mi carne y mi corazón pueden fallar, pero Dios es la fuerza de mi corazón y mi porción para siempre.
El hogar es donde está el corazón, y el corazón es donde estará tu fuerza. Si Dios realmente ha sido tu hogar en tu corazón, entonces nada podrá detenerte. Tu carne puede fallar, pero nunca puedes ser detenido o sacudido.
Este versículo de la Biblia es muy reconfortante para mí en tiempos difíciles. Me recuerda que no importa lo que pase, Dios siempre está ahí. La porción de la palabra al final de este versículo simplemente significa, dividir (algo) en acciones para distribuir entre dos o más personas. Piénsalo, Dios está tomando las luchas que tienes como propias. Él siempre estará allí contigo para ayudarte con las cosas que la vida te pone.
Creo que este versículo es un gran recordatorio del amor que Dios tiene por nosotros. Que no importa cuán grande o pequeño sea el problema en nuestra vida, Él está allí con nosotros. Ese es un amor que me esfuerzo por duplicar en mi propia vida.
No importa por lo que estés pasando hoy; recuerda que Dios está contigo y está aquí para ayudarte; porque te ama y se preocupa por ti. Alabadle en todas las estaciones de la vida!
Salmo 73:26
Mi carne y mi corazón pueden fallar, pero Dios es la fuerza de mi corazón y mi porción para siempre.